Hace unos días anduve en La Serena, mi ciudad natal, y con unos amigos fuimos a un café nuevo, por lo menos para mí. Ellos ya habían ido, y querían ir de nuevo, así que me tincó. El local se llama Black Dog Rock Café.

Me encantó su onda, como su nombre lo dice, es rockero, tiene stencils pegados en las paredes, y también posters de grupos de rock. Pero pasemos a lo importante, bebestible y comestible.

Yo pedí un Capuccino y un trozo de torta, súper rico, nada que decir. Mis amigos tomaron Latte, After Eight y una bebida (buu), y para comer pidieron un Lucifer, que se veía exquisito, no alcance a probar porque mis amigos se lo devoraron. Otra comensal pidió un Pollo Clásico, que se veía rico y sano.

Les dejo las fotos y la carta. Los precios están súper buenos, la comida también, y el ambiente muy grato, ¡un siete! La música rock a un volumen moderado, que permite disfrutarla, pero también tener una conversación amena.

El local se encuentra ubicado en Thomas Jefferson 1530, y atienden de lunes a sábado, para más información de los horarios pueden visitar su página en Facebook https://www.facebook.com/BlackDogRockCafe/

Así que vayan por un cafecito, en especial estos días que hace frío, ¡ah! Pero también tienen sus bebidas frías, así que no hay excusas.

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